Playa del Carmen, 27 de febrero de 2025.— Turistas canadienses acusan a Sandos Playacar de causar infecciones masivas. La cifra de turistas enfermos tras hospedarse en el hotel Sandos Playacar podría ser mucho mayor de lo que han reconocido las autoridades. Mientras que funcionarios locales reportan solo cuatro casos confirmados de infección estomacal, testimonios recopilados en redes sociales y medios internacionales señalan que los afectados se cuentan por cientos y que el problema podría haber iniciado hace meses.
El canal canadiense Global News entrevistó a múltiples turistas que describen síntomas de infecciones intestinales graves tras su estancia en el resort, incluyendo un caso en el que 30 de 32 integrantes de un grupo enfermó. Ante la falta de respuesta por parte del hotel, algunos huéspedes han amenazado con demandar a la empresa, argumentando que el problema se originó en el agua que les proporcionaron durante su estancia.
En Facebook, ya existe un grupo privado en el que al menos 399 personas afirman haber enfermado en el Sandos Playacar. Muchas de ellas necesitaron hospitalización y continúan bajo tratamiento médico. Los testimonios coinciden en que el agua servida en el hotel tenía un sabor extraño, y algunos aseguran que, tras enfermar, los médicos del resort les recomendaron beber únicamente agua embotellada, lo que refuerza la sospecha de un problema con el suministro del líquido.
Infecciones y encubrimiento
El pasado 21 de febrero, un turista argentino alertó al 911 sobre su grave estado de salud, mencionando que podría haber otras 300 personas con síntomas similares. Esto provocó la llegada de policías, personal de Protección Civil e inspectores de la Cofepris, quienes colocaron sellos de suspensión en los restaurantes del hotel.
Sin embargo, de acuerdo con testimonios, estos sellos fueron retirados fuera de horario laboral, presuntamente por personal del hotel, lo que podría constituir una violación a la ley. Además, huéspedes que aún permanecían en el resort reportaron que, durante el fin de semana, el servicio de agua potable fue cortado sin previo aviso, aparentemente para drenar y limpiar las cisternas, aunque el hotel no fue evacuado.
Joel Boily, administrador del grupo de afectados en Facebook, aseguró que han recibido diagnósticos confirmados de infecciones causadas por diversas bacterias y parásitos, como Clostridium difficile, Escherichia coli, Salmonela, Shigella y Entamoeba histolytica, todas comúnmente transmitidas por agua o alimentos contaminados.
Falta de denuncias y evasión de responsabilidad
A pesar de la magnitud del problema, hasta el momento no se han presentado denuncias formales ante las autoridades mexicanas. Turistas han intentado contactar a las autoridades de Canadá y de Quintana Roo, pero con pocos avances. Mientras tanto, el Sandos Playacar se ha deslindado de cualquier responsabilidad.
En un comunicado, el hotel indicó que ha “reforzado las medidas de salubridad” y atribuyó el problema a un aumento generalizado de enfermedades en “varios” centros de hospedaje, sin reconocer directamente el brote en sus instalaciones.
Por ahora, el caso sigue generando controversia y una creciente presión en redes sociales. Mientras, más turistas afectados se organizan para exigir explicaciones y posibles indemnizaciones.
Con información de La Réplica de Quintana Roo https://acortar.link/K4KWbN
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