Por Eduardo De Luna
En el marco de un conversatorio sobre derechos humanos realizada en el auditorio del nuevo palacio municipal de Solidaridad, autoridades y asociaciones coincidieron en que los operativos de revisión a menores para evitar armas o conductas antisociales, deben empezar en casa además de establecer comunicación afectiva con los hijos para evitar situaciones que pudieran dañar su integridad.
Y es que en zonas como Playa del Carmen en que la mayoría de los padres trabajan, los menores y adolescente muchas veces se desarrollan en ambientes no ideales para su crecimiento.
“Tanto mamá como papá salen a trabajar y lamentablemente nuestros niños, la infancia está sufriendo alguna situación de abandono, entonces lo que nos corresponde es involucrarnos, que los padres y las madres estén más atentos, estén más observadores de su desarrollo psicoemocional, además de las cuestiones académicas; preguntarle a nuestros hijos ¿cómo estás? ¿cómo te sientes? ¿quiénes son tus amigos, amigas?, etcétera. Señalo Fabiola Ballesteros, Regidora en Solidaridad.
Y es que el llamado operativo mochila se contrapone con lo que jurídicamente se conoce como el interés superior del menor que es un conjunto de acciones y procesos tendientes a garantizar un desarrollo integral y una vida digna, así como las condiciones materiales y afectivas que les permitan vivir plenamente y alcanzar el máximo de bienestar posible, sin embargo, la cuestión de la seguridad también debe ser garantizada.
“El operativo mochila no necesariamente es una política pública aislada, sino que debe de ir acompañada de un conjunto de medidas en temas de prevención de la violencia, crear comunidades seguros, promover la reconstrucción del tejido social, el terapeuta Cherokee Mena nos decía: confiar en el otro, mirarnos a los ojos los unos a los otros y verdaderamente sentir que no es un extraño el que tengo al lado, es un tema bastante interesante”, subrayó.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación ha emitido diversas jurisprudencias en las que enfatiza este interés superior y señala que debe considerarse la opinión de las niñas, niños y adolescentes en cualquier decisión que les afecte.