El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que “recuperar dinero” es el mayor interés de su gobierno en la detención y colaboración como “testigo protegido” de Emilio Lozoya.
En la conferencia mañanera, avaló el procedimiento de la Fiscalía General de la República para que Lozoya detalle los ilícitos que se cometieron en el sexenio anterior y señale a personas involucradas, ya que esta figura “no se aplicaba en México, aunque existe. Creo que se aplicaba en el caso de delincuentes vinculados con el narcotráfico, pero no de cuello blanco”.
”Nosotros queremos recuperar dinero. Por ejemplo, si hubo un sobreprecio en la planta de fertilizante, se calcula que fue un sobreprecio de 200 millones de dólares. Esto tiene que devolverse al erario”, destacó.
López Obrador explicó que en Estados Unidos se dio a conocer que en México la empresa Odebrecht entregó sobornos por 10 millones 500 mil dólares por los cuales recibió utilidades de alrededor de 40 millones de dólares.
Por tanto, dijo que es necesario conocer qué tipo de contratos o beneficios se entregaron a cambio de los sobornos. “Así es el procedimiento, cuando hay un testigo protegido por la información que ofrece para profundizar en la investigación, castigar a más involucrados y algo que es muy importante en el caso de México, en todos los casos, en Estados Unidos lo practican mucho, la recuperación del dinero”, insistió.
El fin de semana, el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, señaló que, según lo informado, Lozoya es un testigo colaborador que accedió voluntariamente a ofrecer información para investigar, sentenciar o procesar a otros sujetos, ya sea que haya sido o sea integrante de la delincuencia organizada o de una asociación delictuosa, e incluso que sea beneficiario de un criterio de oportunidad.
En tanto, el pasado 17 de julio, la FGR emitió un comunicado en el que señaló que a su llegada a México se le informó a Lozoya “que se le estaban ejecutando las órdenes de aprehensión por los casos Agronitrogenados y Odebrecht, y que desde ese momento quedaba detenido”.
Sin embargo, el ex director de Pemex no ha rendido declaración alguna ante la Fiscalía desde su llegada al país, debido a que horas después de su extradición de España fue sometido a una cirugía.
Lozoya permanece en calidad de detenido en el Hospital Ángeles del Pedregal en la Ciudad de México, donde fue internado la madrugada del 14 de julio.
Tras su arribo al país, la FGR informó que un doctor de la institución le practicó a Lozoya una revisión y encontró anemia desarrollada y problemas sensibles en el esófago, así como una debilidad general, por lo que propuso su internación en un hospital.
La familia del ex funcionario pidió, y se le autorizó, que un médico particular hiciera también una revisión, en la que encontró los mismos síntomas.
Con información de Milenio https://bit.ly/39gxuU8