La manifestación por los cinco años de la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa entra en estos instantes al Zócalo de la ciudad de México encabezada por los familiares de las victimas.
Al grito de “Ni perdón ni olvido” miles de manifestantes se sumaron a la convocatoria para participar en esta movilización que exige verdad y justicia.
Durante el recorrido, las críticas se inclinaron en su mayoría contra la administración del ex presidente Enrique Peña Nieto y la antigua Procuraduría General de la República (PGR) y se demandó castigo a los que “han investigado mal”. Aunque también hubo señalamientos por “la lentitud” para dar resultados del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Familiares exigieron que la Fiscalía General de la República (FGR) de prioridad a las líneas de investigación planteadas por los expertos independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
La manifestación en la que participan miles de personas (más de 6 mil según los organizadores) concluirá en unos minutos con un mitin en la Plaza de la Constitución.
En el contexto del quinto aniversario de la desaparición forzada de 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, Guerrero, familiares de los jóvenes, organizaciones de la sociedad civil, miembros de colectivos sociales y ciudadanos en general marchan en demanda de verdad y justicia.
Padres y madres de los jóvenes señalaron que a diferencia de las marcha de aniversario realizadas durante la pasada administración federal, “hoy con este gobierno hay esperanza y esperamos que pronto den resultados que nos lleven a conocer el paradero de los muchachos”.
En el trayecto del Ángel de la Indpendencia al Zócalo, hicieron una pausa en el llamado antimonumento a los 43 (en la intersección de Paseo de la Reforma, Bucareli y Avenida Juárez) para realizar el pase de lista de los jóvenes ausentes.
Señalaron que han sido cinco “largos, inciertos y dolorosos años a las espera de saber sobre sus hijos, pero aclararon que seguirán luchando hasta dar con ellos, obtener justicia, reparación y garantías de no repetición”.
Con información de La Jornada.