Un grupo de mujeres marcharon del Monumento a la Revolución al Ángel de la Independencia para exigir alto a la violencia contra ellas.
El contingente estuvo encabezado por las madres de víctimas de feminicidio y desaparición.
Lidia Florencio Guerrero, madre de Diana Velázquez quien fue asesinada hace dos años cerca de su domicilio en Chimalhuacán, Estado de México, denunció que a dos años no hay ningún avance en la investigación para dar con los agresores.
“El feminicidio de mi hija como el de muchos está plagado de irregularidades, de omisiones y violaciones a sus derechos, porque cuando a ella la encuentran los patrulleros dicen que es hombre. Desde ahí las primeras hojas de las carpetas de investigación siguen diciendo que es hombre y no se aplicaron los protocolos para que fuera tipificado como feminicidio”, dijo.
A un costado de Lidia, camina María del Carmen, mamá de Pamela Gallardo Volante, desaparecida desde hace dos años. Acusó que tampoco hay avances para dar con el paradero de su hija.
“¿Dónde están?, nuestras hijas ¿dónde están?”, “Porque vivas se las llevaron, vivas las queremos”, son unas de las consignas que expresan las manifestantes algunas vestidas de negro y con el rostro cubierto. El avance del contingente es acompañado por una batucada.
En conferencia de prensa, previa a la marcha, las organizadoras señalaron que la movilización “surge de una necesidad de no dejar las calles y seguir en la protesta, de continuar mencionado que 10 mujeres son asesinadas a diario, mujeres y niñas son violadas, secuestradas, hay trata de personas, hay feminicidios, y que nuestra intención es no parar hasta que esto se detenga”.
Con información de La Jornada.