El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en lo que va de su gobierno no ha recurrido a testigos protegidos ni lo hará, por lo que incluso analizará acabar con esa figura que —a su decir— fue usada hasta para incriminar enemigos.
“No vamos a permitir la tortura, no se van a utilizar esas prácticas que realmente son injustas vergonzosas, que se aplicaban hasta por venganzas para afectar a quienes hablaban con la verdad, o quienes tenían punto de vista distintos al gobierno. Eso ya se termina, no ha habido en todo este tiempo nada así, no hemos tenido testigos protegidos y no vamos a tenerlos”, afirmó.
Al ser cuestionado sobre si eliminaría esa figura, el mandatario aseguró que se analiza la posibilidad e insistió que en su gobierno no se utiliza este método.
A lo que sí ha recurrido, dijo, es a ofrecer apoyo y protección a quienes tienen información de la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa ocurrida la noche del 26 de septiembre de 2014 en Guerrero.
“Aprovecho para hacer de nuevo el llamado para todos, porque esa es una espina que tenemos clavada todavía y queremos conocer la verdad. No perdemos la esperanza de que haya personas que participaron que nos ayuden a conocer la verdad, que sepamos dónde están los jóvenes de Ayotzinapa”, comentó.
Y aclaró: “No es para incriminar a enemigos o adversarios, no se va a usar eso”.
El mandatario federal explicó que la Secretaría de Gobernación (Segob) ya le presentó un plan para hacer justicia en los casos en los que en gobiernos pasados se cometieron prácticas de tortura o todavía no se les ha dictado sentencias a los acusados.
Si García Luna oculta información, sentencia sería mayor
En el tema de la detención del extitular de Seguridad Pública, Genaro García Luna, el presidente confirmó que fue en el sexenio de Felipe Calderón cuando desde la Secretaría de Gobernación se realizó una transferencia de alrededor de 2,000 millones de pesos a una cuenta personal de un familiar del exsecretario detenido en Estados Unidos.
“Sí fue en el tiempo del gobierno de Calderón, o sea, porque pudo ser en el gobierno de Peña porque parece que García Luna tenía unas empresas y daba asesorías, pero no, fue en el tiempo de Felipe”.
López Obrador rechazó dar más detalles sobre las acusaciones contra García Luna y dijo que hay que esperar a lo que él declare en su juicio a realizarse en Estados Unidos.
“Es seguro que García Luna va a declarar, va a hablar, porque si no dice nada, oculta cosas, va a ser mayor la pena si resulta responsable”, destacó.
Dijo que en Estados Unidos incuso se reducen sus sentencias a cambio de aportar información como sucedió en el caso de Odebrecht.
Con información de Política Expansión.