El Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) subastó 82 vehículos que pertenecían tanto a dependencias federales o fueron incautados al crimen organizado.
Se estima que el Gobierno federal llegó a la meta de los 28 millones de pesos que había proyectado recaudar inicialmente, aunque los detalles se darán a conocer durante la conferencia de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador.
La subasta tuvo lugar en la antigua residencia oficial de Los Pinos, hoy Centro Cultural, donde el público interesado pudo comprar su entrada con 100 pesos para conocer las bases, y 50 mil si estaban interesados en participar en la puja.
Entre los vehículos estaban un Lamborghini Murciélago, dos Porsches, dos Corvettes, un Mini Cooper, un Ford Shelby y un Ford Mustang convertible.
“Ay, ay, ay, ay; vamos, vamos, ehhh”, “¡hay tiro, hay tiro en la casa del SAE!”, “¡vale la pena, no se deje!”, gritaban entre las filas de asistentes los trabajadores del SAT durante la subasta.
El lote que tuvo más controversia fue el del Lamborghini Murciélago, cuando uno de los empleados pidió que se considerara una diferencia de mil pesos para la puja, pero la subastadora se negó y dijo que la diferencia tenía que ser, al menos, de cinco mil pesos, ya que el vehículo había rebasado ya el millón 500 mil pesos.
Al final, el precio más alto lo ofertó Roberto López quien, al terminar el evento, posó junto a su nuevo Lamborghini que compró en un millón 775 mil pesos.
Mientras la prensa le tomaba fotos, el nuevo dueño del vehículo pidió que “ahora vigilen que el destino se destine (sic) a la gente de bajos recursos. Eso le corresponde ustedes”.
“Lo que se recaude se destinará a dos municipios de alta marginación en Oaxaca, que es Santo Reyes Yucuná y Santa María Sanir”, informó la semana pasada el director del SAE, Ricardo Rodríguez Vargas.
También, durante la subasta, un Volkswagen modelo 1990, conocido como “vocho”, que pertenecía al desaparecido Estado Mayor Presidencial, tuvo un precio inicial de 10 mil pesos, pero se vendió en 65 mil.
Una camioneta Ford Shelby incautada a un integrante del Cártel del Pacífico se vendió en un millón 900 mil pesos.
Con información de El Financiero.