La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) puso ayer a salto de mata a los diputados.
Desde las 7 horas, los maestros cerraron los accesos a San Lázaro para impedir que las comisiones unidas de Educación y Puntos Constitucionales dictaminaran la nueva reforma educativa.
Sus demandas son: plaza automática, sin evaluación, para alumnos de normales; un transitorio para recuperar el control de las plazas magisteriales y dar el visto bueno al dictamen antes de que sea aprobado en comisiones.
La sesión, programada para las 11 horas, se suspendió y los legisladores acordaron reunirse en el Senado, pero a su llegada la CNTE ya tenía tomados los accesos a esa cámara. Sólo alcanzaron a ingresar 17 de los 66 integrantes de las comisiones, lo que impidió alcanzar el quórum legal para continuar la dictaminación.
Tras esto, los diputados se reunieron en un hotel de Reforma, a donde también llegaron los docentes para presionar y obligar a los legisladores a retirarse del sitio.
Miroslava Carrillo, presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales, señaló que habrá que tener paciencia en el proceso para esta reforma, pues no existen condiciones para avalarla.
Lo que propone el dictamen:
La transferencia de recursos y el control de la nómina se mantendrá a cargo de la SEP.
Continuar la evaluación a los maestros, aunque ya sin carácter punitivo para evitar que sea un pretexto para cesarlos.
Lo que exige la CNTE:
Que los egresados de las normales tengan plaza automática.
Controlar el dinero de la nómina magisterial.
Palomear el dictamen de la reforma educativa antes de que se vote.
CNTE INSISTE EN EL CONTROL DE PLAZAS
La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) tomó la Cámara de Diputados y el Senado de la República para impedir que las comisiones unidas de Educación y Puntos Constitucionales de San Lázaro dictaminaran la Reforma Educativa, las demandas fueron claras: pase automático sin evaluación para alumnos de las normales, un artículo transitorio para recuperar el control de las plazas magisteriales y palomear el dictamen antes de que sea aprobado por las comisiones.
El amago dio resultados alrededor del mediodía, cuando el diputado de Morena, Azael Santiago Chepi, exlíder de la sección 22 de la CNTE, informó que en el proyecto de dictamen se fortalecerían las escuelas normales, eliminando los exámenes de ingreso al servicio profesional docente y dando pase directo a los normalistas.
No va a haber evaluación de ingreso, se está ponderando la formación docente y se está ponderando que sean los estudiantes normalistas quienes puedan prestar sus servicios a educación básica y obviamente garantizar los derechos de todos los trabajadores de educación de este país”, destacó.
El legislador agregó que los profesores están planteando que los trabajadores de la educación sustenten sus derechos laborales en el apartado B del artículo 123 constitucional, el cual precisa que, entre otros aspectos, que los trabajadores sólo podrán ser suspendidos o cesados por causa justificada y en caso de separación injustificada tendrán derecho a optar por la reinstalación en su trabajo o por la indemnización y en los casos de supresión de plazas, los trabajadores afectados tendrán derecho a que se les otorgue otra equivalente a la suprimida o a la indemnización de ley.
BUSCAN SEDE ALTERNA
La CNTE arribó al Palacio Legislativo desde las 4 de la mañana, los profesores con casas de campaña se instalaron en los accesos del recinto impidiendo el ingreso de diputados, trabajadores y visitantes.
Ante este escenario, los coordinadores del PAN, Juan Carlos Romero Hicks; del PRI, René Juárez; de MC, Tonatiuh Bravo y del PRD, Verónica Juárez, se reunieron con el coordinador de Morena, Mario Delgado, en un restaurante aledaño para definir la ruta de aprobación del dictamen y solicitaron que en caso de lograr acuerdos con la Coordinadora, se definiera una sede alterna.
Tras más de cinco horas, finalmente se acordó sesionar en el Senado, sin embargo, a la llegada de los legisladores, integrantes de la Coordinadora ya tenían tomados los accesos, por lo que solamente alcanzaron a ingresar 17 de los 66 diputados que integran las comisiones, lo que impidió que se alcanzara el quórum.
Tras el intento fallido para sesionar, los diputados de Morena y PES se reunieron en el hotel Sevilla Palace de Paseo de la Reforma; al lugar también llegaron integrantes de la CNTE y al grito de “queremos abrogación, no una simulación”, obligaron a los legisladores a retirarse del sitio. Antes de salir, la presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales, Miroslava Carrillo, señaló que habrá que tener paciencia en el proceso de dictaminación de esta reforma, ya que no existen condiciones para avalarla.
La presidenta de la Comisión de Educación, Adela Piña Bernal, apuntó que seguirían dialogando con los maestros, ya que su oposición responde a una falta de información sobre términos laborales.
Los líderes de las fracciones parlamentarias de la Cámara de Diputados ya tienen el dictamen para la Reforma Educativa del gobierno del presidente López Obrador y la cual establece que la transferencia de recursos, el control de la nómina, se mantendrá a cargo de la Secretaría de Educación.
El dictamen, que debe ser aprobado a más tardar el próximo 26 de marzo, establece también que se continuarán las evaluaciones.
La admisión, promoción y reconocimiento del personal que ejerza la función magisterial, directiva o de supervisión, se realizará a través de procesos de selección a los que concurran los aspirantes en igualdad de circunstancias, los cuales serán públicos, transparentes, equitativos e imparciales y considerarán los conocimientos, aptitudes y experiencia necesarios para el aprendizaje y el desarrollo integral de los educandos. Los nombramientos derivados de estos procesos sólo se otorgarán en términos de la ley. Lo dispuesto en este párrafo en ningún caso afectará la permanencia de los maestros en el servicio”, se lee en el proyecto de dictamen.
De acuerdo con legisladores y enlaces legislativos del gobierno federal consultados por Excélsior, se pretende que la Reforma que se apruebe sea por unanimidad, igual como la Guardia Nacional en el Senado, porque se busca la total legitimidad y no dar margen para que la disidencia continúe en las calles protestando.
Con información de Excélsior.