El reconocimiento del autoproclamado presidente venezolano Juan Guaidó por parte de EE.UU. evidencia la responsabilidad directa de Washington por la crisis en el país latinoamericano, ha afirmado este jueves el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov.
En una rueda de prensa tras su reunión con su homólogo argelino, el canciller ruso ha calificado los eventos en Venezuela como “otra injerencia gravísima” en los asuntos de un país soberano.
“Ya conocen bien que se han emprendido varios intentos de deponer a Nicolás Maduro, incluso mediante la eliminación física”, ha recordado Lavrov.
“Que EU.UU. y un número de naciones regionales hayan reconocido al presidente autoproclamado evidencia su responsabilidad directa en la creación artificial de dualidad de poderes preñada de caos y desestabilización política grave”, comentó Lavrov.
El jefe de la diplomacia rusa ha subrayado que “volvemos a convencernos de que EE.UU. se preocupa de manera paranoica de que alguien interviene en sus elecciones sin presentar ninguna prueba” y trata de “regir la suerte de otros pueblos”.
Expresando alarma por las exigencias de una intervención militar en Venezuela procedente de varias capitales, Lavrov ha instado a que “se rechacen rotundamente tales ideas” y llamado a la oposición venezolana a que no se convierta en un títere de un juego sucio ajeno”.
El presidente legítimo Nicolás Maduro denunció la existencia de un plan de Washington “para imponer un Gobierno títere en Venezuela” y anunció su decisión de “romper relaciones diplomáticas y políticas con EE.UU”, dando al personal diplomático estadounidense 72 horas para que abandone el país.
Con información de Actualidad RT.