Más de 2 mil millones de pesos de la Secretaría de Desarrollo Urbano (Sedatu) terminaron en una centena de empresas y cuentas bancarias de ocho países.
Los recursos fueron entregados a Radio y Televisión de Hidalgo, el Sistema Quintanarroense de Comunicación Social, Televisión de Hermosillo y la Universidad Politécnica de Quintana Roo entre 2014 y 2016.
Las cuatro entidades públicas que debían cumplir con servicios de promoción de las actividades de la dependencia, subcontrataron a empresas que a su vez, contrataron a otras compañías que depositaron una parte de los recursos el Banco Monex y CI Banco para comprar dólares que fueron transferidos a diferentes cuentas bancarias en China, Corea del Sur, Estados Unidos, Dinamarca, Ecuador, Bélgica, Pakistán e Israel.
Así lo reveló la Auditoría Superior de la Federación en el Informe de Cuenta Pública de 2016, donde cruzó los datos de convenios realizados en diferentes ejercicios fiscales. Comprobó que la Sedatu entregó 2 mil 130 millones de pesos a los tres sistemas de radio y televisión y a la universidad y éstas le entregaron 94% de los recursos públicos a 126 empresas que no cumplieron con los servicios previstos.
Por este esquema se presumió la comisión de delitos, por lo que la Auditoría interpuso seis denuncias ante la entonces Procuraduría General de la República en 2017 y 2018 en contra de los organismos y la Sedatu, cuya titular era Rosario Robles.
La Auditoría también alertó que en ese año “acrecentaron y evolucionaron las contrataciones para la triangulación de recursos en perjuicio del patrimonio del Estado”, por lo que informó “a las autoridades competentes en materia de investigación delictiva, tributaria y prevención y combate a los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita”.
Este martes, la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda informó de otro hallazgo en la triangulación de recursos entre cuentas en el extranjero y entidades públicas: una universidad recibió alrededor de 150 millones de dólares provenientes de cuentas bancarias ubicadas en 22 países como Suiza, España, Reino Unido, entre otros.
Por ello congeló las cuentas de dicha universidad, pero para respetar el debido proceso, no informó el nombre de la institución que está siendo investigada por presunto lavado de dinero.
Además, 14 universidades públicas tienen denuncias ante la PGR también por presunto desvío de dinero público, la mayoría, a través del esquema conocido como La Estafa Maestra.
Las triangulaciones
En la revisión, la Auditoría detectó que de las 126 empresas utilizadas en estas subcontrataciones, 35 de ellas fueron utilizadas por los tres sistemas de radio y televisión y la Universidad y recibieron mil 901 millones de pesos.
Al revisar las cuentas bancarias, la Auditoría comprobó que 23 de estas empresas repartieron mil 501 millones de pesos a las cuentas de otras 43 empresas por 1,501,074.0 miles de pesos
A su vez, seis empresas implicadas sólo en las contrataciones del Sistema de Radio y Televisión de Hidalgo transfirieron 66 millones 166 mil pesos entre 2014 y 2015 a Banco Monex, S.A., y CI Banco, S.A., para comprar dólares americanos, que a su vez fueron depositados en diversas cuentas bancarias ubicadas en el extranjero.
Desarrollo Comercial El Olivo, S.A. de C.V., depositó recursos públicos a cuentas bancarias de Dinamarca y Estados Unidos, al estado de Nueva York. También a China, Ecuador, Bélgica, Israel y Corea del Sur.
La empresa Servicios Empresariales Helte, S.A. de C.V. entregó recursos a Estados Unidos (Miami y Nueva York) y China. Mientras que Dasismex, S.A. de C.V. lo hizo a China, Corea del Sur y EU.
America Highway Elctronics Network, S. de R.L. de C.V. transfirió dinero a Corea del Sur y China; Comercializadora Texdenim, S.A. de C.V. a Pakistán y China y Neitor Textil, S. de R.L. de C.V. a China y Corea del Sur.
Las Coincidencias
Animal Político revisó algunas de las empresas involucradas y detectó que Comercializadora HDP S. A. de C. V., Comunicaciones M & M S. A. de C. V., Desarrollo Publicitario ADP S. A. de C. V. y Serviúnicos S. A. de C. V. son empresas fantasma declaradas por el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
En la revisión de las actas constitutivas se encontró que Noé Octavio Zendejas es accionista de la empresa Comercial Merchandise New Rise y de Harmless Invention México utilizadas en esta trama, pero también es accionista de la empresa Cuántico Impulsores S. A. de C. V., que también incumplió servicios de digitalización para la SEP en 2013.
Ésta última había sido contratada por el Fomento y Desarrollo de la Investigación Científica y Tecnológica de la Universidad Autónoma del Estado de México (FONDICT-UAEM) y forma parte de las empresas involucradas en La estafa Maestra. Incluso, la Auditoría la citó a comparecer para que aclarara las irregularidades, según se informó en el Diario Oficial de la Federación en diciembre e 2018.
Cuántico Impulsores, Comercial Merchandise New Rise y Harmless Invention Mexico además comparten la misma dirección comercial y más accionistas con otras empresas contratadas por los organismos de radio y televisión en 2016, según se detectó en la revisión de las actas constitutivas.
Jesús Antonio Sánchez Juárez es accionista de Comercializadora Green Recyt y Comercializadora Telaraña y Desarrollo Publicitario ADP. Miguel Ángel Castro Caballero liquidó las empresas Desarrollo Publicitario ADP, Serviúnicos, Servicios NLMK. Al mismo tiempo es representante legal de Comercializadora HDP.
Andrés Guillermo Martínez es representante legal de Serviúnicos, Servicios NLMK y Comercilizadora HDP. Luis Rey Hernández Beltrán es accionista de Publicidad y Servicios Monster Ball y administrador de Harmless Invention México.
Francisco Hernández Ayala aparece como accionista de Estratégika Grupo Consultor y administrador de F&F Commercial Services. Manuel Santos López es accionista de Comercializadora Green Recyt y Comercializadora Telaraña.
Roberto Arias Sánchez es representante legal de Comercial Merchandise New Rise y administrador de Harmless Invention mientras que Roberto Martínez Márquez es consejero de las empresas Harmless Invention y Comercial Merchandise New Rise.
Con información de Animal Político.