La aplicación de los protocolos Amber y Extel ha permitido incrementar el porcentaje de localización de mujeres y niñas en Zacatecas, debido a que se realiza un trabajo coordinado entre las diferentes instituciones en cada fase de la búsqueda.
La fiscal especializada en Atención a Delitos contra las Mujeres por Razones de Género, Fátima Xóchitl Encina, así lo refirió al hablar sobre la desaparición o no localización de mujeres y niñas en el estado.
En entrevista con Notimex, la funcionaria indicó que el aumento de éxito de localizaciones se debe a que los familiares que reportan la ausencia de la mujer o niña deben llenar un cuestionario, en el que especifican probables ubicaciones, lo que se suma a una rápida actuación de las autoridades. Sobre las probables razones por las que una mujer se ubica en condición de no localizable.
Encina explicó que -hay contextos quizá de violencia”, los que se conocen cuando se ubican a la víctima, casos que se den mayormente cuando se trata de adolescentes.
En ese supuesto de violencia, cuando se cumplen los requisitos constitutivos de un delito, sí se han interpuesto las denuncias correspondientes y entonces la Fiscalía Especializada en Atención a Delitos contra las Mujeres por Razones de Género procede a intervenir para hacer la investigación, explicó.
Entre los contextos de violencia, señaló que no necesariamente son violaciones, aunque sí pueden ser de tipo sexual, violencia familiar o relacionados con perjuicios al sano desarrollo de las personas menores de edad.
Al referir la carencia de estadísticas, debido a que corresponden a la Fiscalía Especializada de Desaparición Forzada, reiteró que existe un trabajo coordinado con la Fiscalía General de Justicia del Zacatecas (FGJZ) y sus diversas áreas.
Sobre esta problemática, en el primer informe de actividades de la FGJZ, dado por su titular, Francisco Murillo Ruiseco, con cifras correspondientes al 2018, indica que en el año de referencia Zacatecas contaba con un registro de 266 personas ausentes.
De las 266 ausentes, 59 estaban en calidad de desaparecidas y 207 en no localizadas. Del total, 122 fueron localizadas con vida, 14, fallecidas y 130 continuaban ausentes. Asimismo, explica la diferencia entre personas desaparecidas y no localizadas.
En la primera es “la persona cuyo paradero se desconoce y se presuma, a partir de cualquier indicio, que su ausencia se relaciona con la comisión de un delito”; de las 266 personas, el 22 por ciento estaban en este supuesto.
En el segundo supuesto estaban el 78 por ciento de las víctimas, que se define como “a la persona cuya ubicación es desconocida y que de acuerdo a la información que se reporte a la autoridad, su ausencia no se relaciona con la probable comisión de un delito”.
Al desglosar por género y edad a las personas desaparecidas, la fiscalía indicó que 49 eran hombres, de los cuales cuatro eran menores; y una decena fueron mujeres, de ellas tres eran menores.
En las no localizadas, 120 eran hombres, de los cuales 100 fueron adultos y 20 menores; y 87 mujeres, 37, mayores y 50, menores. Es de referir que el protocolo Alba se activa cuando se da la desaparición o no localización de mujeres, adolescentes y niñas, es un mecanismo de búsqueda inmediata, que coordina esfuerzos de los tres órganos de gobierno.
En el 2018 se activó 92 veces, se localizaron 73 mujeres con vida, tres fallecidas y 16 seguían ausentes. Alerta Amber es únicamente para niñas, niños y adolescentes.
Es un mecanismo de búsqueda en el que los tres niveles de gobierno, medios de comunicación, redes sociales y sociedad civil coadyuvan en la pronta localización de menores de edad, cuya vida o integridad física está en riesgo.
Tiene una temporalidad de 72 horas, prorrogables a 72 más.
La Alerta Extel es un mecanismo de combate al delito de extorsión, pero que radica en la búsqueda de una o más personas, para agilizar su ubicación cuando están ocultas o recluidas bajo la aparente modalidad de secuestro virtual.
Con información de Notimex.