Jaime Humberto Hermosillo, director de películas como La tarea o María de mi corazón, falleció este lunes, dejando un importante legado creativo que será honrado tanto por el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) como por la Cineteca Nacional.
Nacido el 22 de enero de 1942, en Aguascalientes, fue el lugar donde descubrió su interés por el cine. Creció en el seno de una familia conservadora de la clase media, asunto que se permeó en su filmografía al desafiar las convenciones y los códigos morales con los que fue criado dentro de sus historias.
Luego del anuncio de su deceso, en redes sociales, Guillermo del Toro, expresó: “Falleció mi maestro. Uno de los grandes y una persona que transformó la cultura fílmica en Guadalajara. Siempre un hombre digno, valiente, transgresor y coherente. Ver La Pasión según Berenice me hizo creer que se podía ser cineasta en provincia”.
Mientras, el Imcine publicó: “Gran provocador de nuestras pantallas a través de su cine Jaime Humberto Hermosillo siempre exploró temas incluyentes y valiosos, con la diversidad o la expresión plena de nuestra identidad. Gracias. Seguiremos mirando tus historias de osadía y libertad”.
El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura sostuvo: “El cineasta mexicano deja un importante legado a la cinematografía nacional y latinoamericana. Su obra fílmica desmitificó realidades culturales y sociales de México”.
La Secretaría de Cultura federal, a través del Imcine, Canal 22 y la Cineteca Nacional, realizará diversas acciones para homenajear su vida y obra, adelantó la dependencia.
En 2013, Jaime Humberto Hermosillo, al recibir la medalla Salvador Toscano al Mérito Cinematográfico 2012, consideró: “Es un reconocimiento merecido… espero que se encienda una luz sobre mi persona y mi obra y me ayude para volver a filmar en 35 mm”.
Agregó: “Otros premios se pueden recibir dos o tres veces en la vida, pero la medalla Salvador Toscano una sola vez; además viene de la Cineteca Nacional, que ha sido determinante en mi vida y en mi carrera, a la cual he sido asistente asiduo desde que estaba en los Estudios Churubusco, donde hice funciones privadas de mis películas Las apariencias engañan y María de mi corazón”.
Hermosillo recordó: “María de mi corazón, incluso, fue seleccionada para una Muestra Internacional de Cine de la Cineteca, pero tuvo algunos problemas; en ese entonces Alejandro Pelayo me dijo: ‘No vamos a poder exhibir María de mi corazón, porque es una película que no se hizo mediante los sindicatos’. Le llamé y le dije: ‘No cobren al público por verla, pero les pido que la mantengan en la programación’, así logramos burlar ese obstáculo de la censura, pero a lo largo de mi carrera la he enfrentado de muchos tipos”.
Con información de La Jornada.