El cohete “Falcon 9”, portando el Nanosatélite al interior de la cápsula “Dragon”, despegó a las 11:29 horas, tiempo de la Ciudad de México, desde las instalaciones de NASA en Cabo Cañaveral, Florida, Estados Unidos, después de un día de retraso por fuertes vientos, como lo anunció Space-X, la empresa encargada del lanzamiento.
Tras dejar atrás la esfera terrestre con su valiosa carga, la cápsula “Dragon” se acoplará en un lapso de dos a tres días a la Estación Espacial Internacional, para que ésta lo coloque en su órbita, aproximadamente el 27 de enero próximo.
La misión del Nanosatélite mexicano será establecer intercomunicación con la constelación de satélites “GlobalStar”.
Con el ingenio mexicano, AztechSat-1 podría significar una innovación disruptiva, al posibilitar, con su interconexión con GlobalStar, el dejar de utilizar solamente estaciones de tierra para el control y operación de Nanosatélites, lo que permitiría incrementar el intercambio de datos para aplicaciones satelitales en el mundo y una reducción en costos.
El desarrollo del AztechSat-1 fue coordinado por la AEM con la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), la que lo diseñó, desarrolló, probó y operó con la participación de estudiantes y profesores.
El proyecto obtuvo financiamiento parcial del Fondo Sectorial de Investigación, Desarrollo Tecnológico e Innovación en Actividades Espaciales CONACYT-AEM, a partir de una rigurosa selección después de haber competido con otros proyectos que participaron en una convocatoria pública.
El AztechSat-1 superó las estrictas pruebas técnicas de la NASA, lo que, desde el primer astronauta mexicano Rodolfo Neri Vela en 1985, representa hoy el regreso del talento de México al espacio
Con información de SCT.