El representante en México del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Christian Skoog sostuvo que el país requiere unir esfuerzos para “superar las condiciones de violencia, pobreza, desigualdad y discriminación que aún afectan y limitan el potencial de millones de niñas, niños y adolescentes”.
Al presentar el Informe Anual 2018, Skoog aseguró que “aún persisten un gran número de desafíos en México como asegurar que las procuradurías reciban un presupuesto adecuado, disminuir los homicidios de niñas, niños y adolescentes, eliminar la violencia como disciplina en el hogar y garantizar un trato humano y digno a toda la infancia migrante”.
El documento presentado por el diplomático contiene cifras que alertan sobre la vulnerabilidad en que se encuentra la niñez en México, donde el 63% de los niños entre uno a 14 años han sufrido algún tipo de violencia, siendo los principales escenarios de violencia la escuela, la vía pública y el hogar.
El organismo de la ONU resaltó en su informe que entre los años 2010 a 2017 ocurrieron 10 mil 547 homicidios, de los cuales 76% de las víctimas corresponden a menores de 18 años, en tanto que el 24% fueron mujeres.
El documento advierte que en materia de asesinaos, “el grupo más vulnerable fueron los y las adolescentes de entre 12 y 17 años ya que representan 78% del total de las defunciones”.
A esa cifra alarmante, se añade que de acuerdo con cifras oficiales, “a finales de 2017 alrededor de 20% de las personas extraviadas o desaparecidas eran niñas, niños y adolescentes”, de los cuales 60% fueron niñas o mujeres adolescentes.
El informe destaca que el 60% de las mujeres adolescentes de entre 15 y 17 años, “han sufrido al menos un incidente violento ya sea emocional, físico, sexual o económico”.
El nivel de violencia es prácticamente generalizado para la niñez en México, pues en un país con casi 40 millones de menores de 18 años, 5.1% de niñas y niños menores de cinco años reciben cuidados inadecuados, “están solos o al cuidado de otro niño o niña menor de 10 años”, en tanto que la mitad de los niños y niñas en el país, “han sufrido golpes, patadas y puñetazos en su escuela”.
En cuanto a la situación económica, Unicef retoma datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) para exponer que el 51% de los menores de 18 años viven en situación de pobreza, de los cuales 2 de cada 10 están en pobreza extrema, y de manera general, “la mayor carencia entre los niños y niñas es la seguridad social, la cual afecta a 6 de cada 10 niños”.
En cuestión alimentaria, el informe anual de Unicef resalta que, si la desnutrición crónica es de 20% en niñas y niños menores de 5 años en zonas rurales, en hogares indígenas el promedio es de uno de cuatro menores desnutridos.
Se añade que 31% de los niños y niñas en México “reciben leche materna como único alimento durante sus primeros seis meses de vida”.
El documento destaca que el 33% de niñas, niños y adolescentes padecen obesidad y sobrepeso, padecimiento que se presenta en 5% de los menores de 5 años.
El documento de Unicef expone que, en materia educativa, unos 4 millones de niñas, niños y adolescentes están fuera del sistema educativo y 600 mil están en riesgo de dejar la escuela, en tanto que uno de cada diez niños que habla una lengua indígena no asisten a la escuela por el nivel de marginalidad en que se encuentra, en tanto que en adolescentes indígenas de 16 años sólo la mitad ha concluido los estudios de secundaria.
Sobre la presencia de la niñez migrante, la Unicef resalta que México “es un país de origen, tránsito, destino y retorno de miles de niñas, niños y adolescentes migrantes que se ven forzados a dejar sus hogares buscando protección, seguridad y mejores oportunidades de vida; que huyen de situaciones graves de violencia, extorsión, pobreza y que han tenido un acceso limitado a los servicios de salud o educación de calidad en sus países de origen”.
El documento retoma datos de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación, en el que se destaca que, en 2018, 31 mil 717 niñas, niños y adolescentes fueron “detectados por autoridades migratorias” de los cuales 25 mil 965 fueron retornados a sus países de origen.
Del total, 10 mil 417 viajaban solos, siendo el 98% originarios de los países del Triángulo Norte de Centroamérica: 5 mil de Guatemala, 4 mil 175 de Honduras y mil 24 de El Salvador.
Durante la presentación del documento, el responsable de Unicef en México Christian Skoog, dio a conocer algunos de los programas apoyados durante 2018 en que el organismo de la ONU recibió 365 millones 116 mil 290 pesos de pesos en donativos de los cuales el 41% corresponden a aportaciones locales.
Entre los programas apoyados con los fondos el diplomático informó sobre un diagnóstico de la situación de la población indígena y afrodescendiente; de la colaboración con el Instituto Nacional Electoral (INE) para la consulta a 5 millones de menores en 2018; la implementación de un programa de apoyo a 4 mil 500 menores de zonas de alta violencia en Guerrero y Chihuahua; reparación de 104 escuela afectadas por el terremoto de 2017, así como para atender la emergencia de las caravanas migrantes.
Con información de Proceso.