Xcaret enfrenta litigio por apropiación cultural: el Indautor retoma el caso

En investigación documental, dieron a conocer que continúa proceso legal de Xcaret, quien enfrenta litigio por apropiación cultural.

Esta investigación documental fue realizada por el periodista Octavio Martínez para la revista Proceso, de circulación nacional.

La empresa Xcaret se encuentra en el centro de una disputa legal luego de que el Instituto Nacional del Derecho de Autor (Indautor) retomara de oficio un procedimiento iniciado en 2022 por el Gran Consejo Maya, que acusó al parque temático de apropiarse indebidamente del patrimonio cultural maya con fines comerciales.

El conflicto comenzó cuando el Gran Consejo Maya presentó una demanda legal para proteger sus tradiciones y símbolos culturales, argumentando que Xcaret había explotado durante años elementos representativos de esta comunidad en sus atracciones y promociones turísticas. Entre las expresiones culturales señaladas se encuentran el juego de pelota, la danza de los búhos, la travesía sagrada maya, la representación del Hanal Pixán (Día de Muertos maya) y las bodas mayas.

En respuesta, el Indautor impuso medidas precautorias para que la empresa suspendiera el uso de estos elementos en sus parques temáticos y en sus plataformas digitales. No obstante, pese a la orden oficial, Xcaret continuó utilizando los símbolos mayas, lo que derivó en nuevas sanciones económicas y la acusación de rebeldía por parte del organismo federal.

En medio del litigio, Xcaret anunció en marzo de 2024 que había llegado a un acuerdo con el Gran Consejo Maya para colaborar en la promoción y preservación del patrimonio maya, lo que llevó a este organismo indígena a desistirse de la demanda. Sin embargo, el Indautor rechazó el desistimiento, argumentando que el caso debía continuar, ya que el patrimonio cultural es un derecho colectivo que involucra a todas las comunidades mayas y no sólo al Consejo que promovió la denuncia.

Las inspecciones realizadas por el Indautor en 11 instalaciones de Xcaret revelaron que la empresa no acató las medidas precautorias impuestas. Como resultado, el organismo reiteró las restricciones e impuso sanciones económicas adicionales.

Xcaret respondió interponiendo una serie de amparos en los que argumentó que las medidas en su contra eran ilegales. El caso fue trasladado de los juzgados de Quintana Roo a la Ciudad de México debido a un conflicto de competencia judicial, y finalmente el Vigésimo Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa resolvió que un juzgado en la capital del país se encargará de resolver el juicio de amparo que la empresa promovió para anular las sanciones.

Este caso ha puesto en evidencia el fenómeno del extractivismo cultural, señalado por activistas como Pedro Uc Be, integrante de la Asamblea de Defensores del Territorio Maya Müuch’ Xiinbal. Uc Be advirtió que el uso comercial de símbolos y tradiciones mayas por parte de Xcaret distorsiona la identidad cultural de este pueblo originario.

“Lo que se muestra en Xcaret no es realmente cultura maya, pero mucha gente lo cree así. Eso pervierte nuestras tradiciones con fines comerciales y turísticos”, declaró Uc Be, quien también ha denunciado el impacto del Tren Maya y de las granjas porcinas en la región.

El litigio se perfila como un caso relevante para la protección del patrimonio cultural en México, ya que es uno de los primeros procesos enmarcados en la Ley Federal de Protección del Patrimonio Cultural de los Pueblos y Comunidades Indígenas y Afromexicanas, promulgada en 2022.

El abogado Miguel Ángel García García, especialista en derechos de autor, explicó que esta controversia podría sentar un precedente importante que disuada a otras empresas de explotar elementos culturales de los pueblos originarios con fines mercantiles.

“Además de las sanciones económicas, la ley contempla indemnizaciones por daños inmateriales, lo que podría marcar un precedente clave para la protección del patrimonio cultural en México”, subrayó García García.

La empresa Xcaret ha manifestado que mantendrá su defensa legal hasta agotar todas las instancias judiciales. Mientras tanto, el Indautor continúa con el proceso de infracción administrativa en su contra, en espera de una resolución definitiva que determinará el futuro de las expresiones culturales mayas dentro del parque temático.

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