En las festividades patrias, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador romperá algunos protocolos que se llevaban al pie de la letra en sexenios anteriores, principalmente la cena con funcionarios federales e invitados especiales, que se convertirá en una kermés con aguas de sabores y comida típica.
La austeridad y romper con esquemas de seguridad es lo que caracterizará los festejos del 15 y 16 de septiembre, los cuales estarán a cargo del gobierno federal.
Para los festejos del Grito de Independencia que encabezará, por primera vez de manera oficial, López Obrador, se tienen contemplados 500 invitados especiales que asistirán a Palacio Nacional. Entre ellos el cuerpo diplomático, el gabinete federal, legisladores y algunos empresarios cercanos al Mandatario.
Esta vez no se contará con una cena ostentosa, sino que se llevará a cabo una convivencia en el Patio Central de Palacio Nacional, donde se servirán aguas frescas y platillos típicos que rodearán el lugar, como en una kermés.
Con información de Vanguardia.