El Instituto Nacional Electoral (INE) deberá trabajar en “una zona de potencial riesgo presupuestal” durante todo el año próximo pero no recortará personal.
“Sería cortarnos las manos porque no podríamos brindar los servicios ni organizar las elecciones […] sería condenar las elecciones de 2021 al fracaso y eso no lo vamos a hacer”, advirtió el consejero presidente del organismo, Lorenzo Córdova.
El INE decidió los tres primeros ajustes para enfrentar el mega recorte de mil 71 millones de pesos a su presupuesto: suspendió dos proyectos de inversión para 2020 y decidió posponer “al límite” decisiones entorno a la elección federal 2021.
Acordó no renovar la infraestructura informática para el monitoreo de radio y televisión -equipo que caducará en breve- y suspender la mejora de los módulos de atención ciudadana.
Con información de Vanguardia.