Científico elimina toxicidad del sargazo. Con un cóctel de nueve bacterias, enzimas y hongos naturales, el científico suizo Elio Bortoli logró degradar de manera rápida y ordenada los metales pesados del sargazo como el arsénico, cobre y manganeso, para poderlo aprovechar de manera segura en composta, alimento para ganado, elaboración de ladrillos para la construcción o material para fabricar suelas de zapatos.
Se trata de un descubrimiento patentado en México, Estados Unidos y Europa con certificado de producto orgánico, que busca acabar con el problema de la arribada masiva de sargazo, macro-alga color marrón de olor pestilente que ahuyenta al turismo en Quintana Roo, y de paso ayudar al medio ambiente, que es el principal activo en la región.
Alejandro Romero, director de Geolife México, empresa asentada en Guadalajara, Jalisco, que distribuye la tecnología, explicó que con la aplicación del tratamiento in situ, que acelera el proceso de degradación del sargazo a la orilla de la playa, se acaban los olores nauseabundos, además de que se evita la generación de lixiviados (jugos tóxicos), que corren el riesgo de filtrarse a los mantos acuíferos.
“Al final vamos a tener una composta en un tiempo récord, y además con un nivel de nutrientes bastante importante; esa composta se va a poder utilizar con toda seguridad y con toda tranquilidad en áreas verdes, en agricultura, o en lo que se quiera usar”, detalló.
Señaló que hasta ahora se han tratado con este cóctel natural importado de Suiza alrededor de 130 toneladas de sargazo en hoteles de Cancún, con resultados muy positivos respaldados con estudios de laboratorio, que con la tecnología de Geolife logran combatir la proliferación de sargazo, un fenómeno vinculado con el cambio climático.
Destacó que se encuentran en pláticas con el municipio de Solidaridad para poder brindar el servicio integral y que la composta de alta calidad que resulta del sargazo, pueda ser utilizada para fertilizar áreas verdes, camellones e instalaciones deportivas.
“Contamos con todos los avales, hicimos la consulta en su momento tanto con la Sagarpa, que ahora es Sader, la hicimos con la Cofepris, la hicimos también con el SAT, para que pudiéramos realizar la importación de manera legal y de manera tranquila; estos productos al no ser medicamentos ni alimentos no requieren ningún tipo de registro”, subrayó.
Alejandro Romero agregó que Bioma, la casa matriz de Geolife afiliada a la Cámara de Comercio Suizo-Mexicana, pertenece a la lista de mil empresas que ayudan al cuidado del medio ambiente de la Fundación Solar.
Con información de Excélsior https://www.excelsior.com.mx/