El gobierno mexicano anunció su adhesión al “Llamado a la Acción de Christchurch”, un movimiento al que se han sumado diez países y que persigue la eliminación de contenido terrorista en Internet.
La iniciativa, que es el resultado de un trabajo conjunto lanzado en 2017 por gigantes de la web como Twitter, Google, Facebook, Amazon, entre otros, establece compromisos de los Estados y las empresas de servicios en línea para prevenir y combatir el uso del Internet por terroristas, señaló la cancillería mexicana en su cuenta de tuiter.
En el marco del 74 periodo de sesiones ordinarias de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que se realiza en Nueva York, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard Casaubón, participó en un acto sobre Christchurch, convocado por los gobiernos de Nueva Zelanda y Francia.
“El @GobiernoMx anuncia su adhesión al “Llamado a la Acción de Christchurch”, el cual establece compromisos de gobiernos y proovedores de servicios en línea para prevenir y combatir el uso de Internet por terroristas y la difusión de contenido que puede contribuir al terrorismo”, señaló la cancillería en su plataforma digital.
En el marco de los trabajos en Nueva York, la cancillería informó que su titular “condena los actos de violencia inspirados por ideologías racistas y xenofóbicas. (Y) también hace un llamado para atender el fenómeno del uso de Internet en los procesos de radicalización violenta, respetando siempre el derecho a la libre expresión”.
En su tuiter, Ebrard indicó que el evento y el llamado cobran relevancia para México luego del ataque a la comunidad mexicana en El Paso, Texas, el pasado 3 de agosto.
“En el evento ‘christchurch (Masacre en Nueva Zelanda contra la comunidad musulmana) call for Action’ sumamente importante para México y la comunidad México-norteamericana a partir de la tragedia de El Paso, Texas. Hay compromiso del mundo contra el odio y el terror”, señaló en esa red.
El “Llamado a la Acción de Christchurch” también urge a combatir las causas de la violencia extremista, a mejorar la transparencia en la detección y eliminación de este tipo de contenido y a garantizar que los algoritmos detengan la distribución viral de dichos productos.
Con información de La Jornada.