El enfrentamiento entre China y Estados Unidos se agravó después de que Donald Trump anunció que subiría los aranceles de casi todos los bienes que EU importa del gigante asiático y ordenó a las empresas estadounidenses buscar una alternativa a China para fabricar sus productos.
Lo anterior como respuesta al anuncio de Pekín, unas horas antes, de nuevos aranceles sobre productos estadounidenses, lo cual desató la ira presidencial.
ENFRENTAMIENTO COMERCIAL CHINA EU
El enfrentamiento comercial entre China y EE UU data de hace casi un año y medio y cada vez se ve más lejana la posibilidad de un acuerdo que termine con esta nueva guerra fría.
El anuncio de Pekín de este viernes es la respuesta a los aranceles anunciados por Washington a principios de este mes.
Dicho anuncio ha provocado un nuevo terremoto en las Bolsas y entre la comunidad empresarial estadounidense.
NO FUE LA ÚNICA REPRESALIA
Como suele hacer Trump, a través de Twiter, insistió en que las multinacionales estadounidenses deben buscar “una alternativa a China, incluido traer de vuelta a CASA nuestras compañías y fabricar nuestros productos en EE UU”.
En su opinión, “las vastas cantidades de dinero hecho y robado por China a EE UU, año tras año, durante décadas, deben ACABAR y acabarán”, aseguraba el mandatario.
“No necesitamos a China y, la verdad, estaríamos mejor sin ellos”, apuntó.
Trump incluyó al presidente de la Reserva Federal, Jay Powell. “Mi única pregunta es: ¿cuál es nuestro mayor enemigo, Powell o Xi [Jinping, presidente chino]?”.
El presidente Trump insiste en que Powell baje los tipos de interés para abaratar el dólar.
Las causas
Trump había anunciado el 1 de agosto la imposición de nuevos aranceles sobre 300.000 millones de dólares en productos chinos.
De esta manera ponía fin a la tregua alcanzada en su reunión con Xi tras la cumbre del G20 en Osaka (Japón) el 29 de junio, en la que acordaron retomar las negociaciones comerciales.
Posteriormente, el 15 de agosto, anunció un retraso de tres meses para productos como los juguetes o productos electrónicos de consumo, hasta el 15 de diciembre.
CRÍTICAS EMPRESARIALES
La Cámara de Comercio estadounidense rechazó de inmediato la orden de Trump de abandonar China, donde las empresas estadounidenses acumulan importantes inversiones.
“Aunque compartimos la frustración del presidente, creemos que el camino correcto es un compromiso continuo y constructivo”, declaraba este viernes Myron Brilliant, vicepresidente de la organización. “Las guerras comerciales no se ganan”
Brilliant también declaró estar en total oposición al “las guerras comerciales son buenas y fáciles de ganar” del presidente estadounidense.
Las amenazas de Trump no solo se han ceñido a las empresas de EE UU presentes en China.
El mandatario ha pedido que las grandes empresas de paquetería examinen los envíos procedentes de China, y los devuelvan si lo creen necesario, en busca de fentanilo, una de las sustancias narcóticas que se encuentra detrás de la epidemia de adicción a los opioides en EE UU.
Trump acusa a Pekín de tolerar la producción en su suelo y el envío de la droga a Estados Unidos.
Tanto FedEx como UPS respondieron asegurando que ya toman importantes medidas para impedir el uso de sus redes de transporte en actividades ilegales o el envío de drogas.
Sin embargo, sus acciones ya se habían desplomado más de un 3% en Bolsa.
Por el momento, las negociaciones entre China y EE UU se mantienen. Sin embargo, la única reunión cara a cara ha tenido lugar en Shanghái el 30 de julio
El próximo encuentro estaba previsto para septiembre en Washington.
Con información de Zócalo Virtual.