Feministas contra ley antiderechos de Arcila en Quintana Roo
Grupos de activistas defensoras de los derechos de la mujer emitieron un posicionamiento contra la ley de maternidad propuesta por el diputado del PAN Eduardo Martínez Arcila la cual contraviene disposiciones nacionales e internacionales en materia de derechos reproductivos.
Aquí te presentamos el comunicado íntegro:
Derivado de la presentación de la INICIATIVA DE LA LEY DE PROTECCIÓN A LA MATERNIDAD PARA EL ESTADO DE QUINTANA ROO realizada por el Diputado Eduardo Martínez Arcila las colectivas aquí firmantes, hacemos un exhorto a las y los Diputados integrantes de esta XVI Legislatura para desechen la iniciativa presentada, dado que contraviene a los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.
Lo anterior se base en el siguiente:
Derivado del análisis técnico y jurídico de dicha iniciativa señalamos que existe la intención de una SOBREREGULACIÓN en la materia de derechos que desean proteger, así como CONTRADICIÓN en los instrumentos jurídicos internacionales y nacionales, ya que, en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en su artículo 4 estipula en su segundo párrafo que toda persona tiene derecho a decidir de manera libre, responsable e informada sobre el número y el espaciamiento de sus hijos y en su párrafo 4 menciona que toda persona tiene derecho a la protección de la salud.
Es necesario mencionar que esta iniciativa de ley nos preocupa a las Colectivas Feministas de Quintana Roo pues solo se pretende reflejar en ella los principales aspectos que conlleva a la maternidad y no se habla sobre los derechos que tiene la mujer si en algún momento decide no quedar embarazada, no hay alternativas para que las mujeres y niñas del Estado ejerzan sus derechos sexuales y reproductivos ya que no se habla sobre las opciones que tendrán en caso de decidir no llevar a término el embarazo, es decir no se menciona la despenalización del aborto, solo se contempla a las mujeres que se encuentra ya en estado de gravidez, suponiendo que todas queremos ser madres e incluso refuerza los estereotipos de roles de género, mediante expresiones sexistas como la de ejercer la maternidad con responsabilidad, relegando a las mujeres a cumplir con su única función que es la de la reproducción humana y quitando la carga de la crianza compartida de las infancias a través de las paternidades responsables.
A través del análisis jurídico que realizamos pudimos observar que en nuestro país ya se contemplan derechos muy concretos tanto para el periodo de gestación, como para los años subsecuentes al mismo, para el cuidado que la madre haya de darle al hijo, especialmente tratándose de madres trabajadoras, que coticen en cualquiera de las dos instituciones de protección social, así como las que no.
Advertimos que en esta iniciativa más que una serie de derechos relativos con la relación íntima y estrecha que hay entre la madre y el hijo(a), se quiere imponer a la mujer o niña la obligación de hacerse responsable del embrión que se esté gestando en su vientre desde el primer momento, adjudicándole los cuidados que deberá tener para que los nueve meses en promedio que dura la gestación llegue a buen término, sin reconocerle su derecho a decidir sobre su cuerpo, y en ningún momento se toca el tema del aborto espontáneo o natural, es decir aquel que no es provocado intencionalmente; y el aborto terapéutico, que es la interrupción del desarrollo fetal por razones estrictamente médicas. Se quiere privilegiar el derecho de nacimiento del embrión desde el momento de la concepción contrariando a lo establecido en la ley que dice que a partir de que jurídicamente se tenga a un niño(a) vivo y viable, nacen una serie de derechos inherentes al mismo y a la relación madre-hijo(a).
Consideramos que la maternidad en México vive una redefinición y proceso de desmitificación ante la cada vez más creciente inserción de las mujeres en la economía y la política, el control natal y la reproducción asistida, entre otros factores. La maternidad es un concepto social que varía según los tiempos, pero con esta iniciativa de Ley es una imposición cultural, social, religiosa e incluso económica.
Concluimos que es necesario impulsar reformas e iniciativas de ley que vayan acorde a la realidad de las necesidades de la sociedad, así como el poder contar con Servidores Públicos Profesionistas como Diputadas y Diputados que tengan conocimiento en Derecho Parlamentario, si lo antes señalado se hubiera cumplido el Diputado Eduardo Lorenzo Martines Arcila en lugar de promover esta iniciativa de ley sobre maternidades hubiera promovido un punto de acuerdo ante el Pleno del Congreso para exhortar respetuosamente al Senado de la República Mexicana para que emita un dictamen por el que solicite al Poder Ejecutivo Federal suscribir y enviar para su ratificación, el Convenio 183 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), pues consideramos que este convenio es de vital importancia si realmente su preocupación genuina es proteger a la mujer embarazada y no coartarle su derecho sexual y reproductivo.
Lo anterior porque consideramos un desperdicio de recursos y tiempo del Poder Legislativo el desviar la atención de las Comisiones de la XVI Legislatura del Estado de temas prioritarios para crear sobreregulación, lo que obstaculiza el acceso al ejercicio de nuestros derechos humanos.
Rechazamos que para la aprobación de la iniciativa en comento, se pretenda engañar a la población, utilizando el argumento de contar con un ordenamiento jurídico de la mujer sobre su derecho a decidir, haciéndole creer que las mujeres podrán decidir si desean o no continuar con el embarazo, ya que, como lo hemos mencionado esta Iniciativa propone todo lo contrario.
Es urgente que las reformas sobre el tema de la maternidad se hagan en normas de trabajo para la equidad, relacionadas con las responsabilidades familiares (paternidad y maternidad), la no discriminación en el ámbito laboral, la licencia de maternidad por adopción, la protección a la maternidad de las trabajadoras del campo, la protección a la maternidad de las trabajadoras domésticas y las licencias de paternidad, así como el ejercicio de una paternidad responsable.
Por otra parte, de manera especial para la Zona Maya de Quintana Roo, exigimos que se deje de criminalizar la labor de las parteras tradicionales. Que haya un reconocimiento por parte de las instituciones de salud ya que su trabajo es fundamental en estos tiempos de pandemia. Así como investigar, sancionar y combatir los embarazos a edad temprana que solo se traducen en violencia contra niñas y adolescentes en la Zona Maya.
La nula educación sexual integral, la falta de acceso de anticonceptivos, la poca atención médica y la criminalización por el derecho a decidir, obligándonos a maternar nos deja en una cuádruple vulneración para lograr un desarrollo integral de nuestros proyectos de vida. Por ello, es que para las mujeres de la zona maya es fundamental, que se impulse todas las acciones necesarias en materia normativa que permitan verdaderamente garantizar el acceso a nuestro derechos sexuales y reproductivos.
En consecuencia, no permitiremos que sigan vulnerando nuestros derechos humanos, ni que se nos siga conceptualizado en los marcos normativos, como simples reproductoras, y objetivando el uso de nuestros cuerpos.
Como señala Marcela Lagarde, históricamente los cuerpos de las mujeres han sido territorios ocupados, y para muestra esta Iniciativa que vulnera en todo momento nuestros derechos sexuales y reproductivos.
No permitiremos que ninguna mujer en Quintana Roo, siga siendo cosificada, y conceptualizada desde la misoginia de diputadas y diputados que son a todas luces antiderechos. Por lo que desde el Norte de Nuestro Estado, las Mujeres de la Zona Maya y el Sur Quintana Roo, las quintanarroenses, no claudicaremos en la lucha por generar marcos normativos que privilegien los derechos humanos de las mujeres, señalaron en el comunicado.