Después de 50 años, los Jefes de Kansas City vuelven a conquistar el trofeo Vicent Lombardi, al vencer 20-31 a los 49ers de San Francisco, en el Súper Tazón 54, celebrado en el Hard Rock Stadium, en Miami, Florida, por la temporada 100 de la NFL.
Un arranque prometedor fue el que representó el primer cuarto, con un San Francisco que amenazaba en firmar los primeros puntos, sin embargo, en tercera y diez, Garoppolo se deshizo del ovoide y se tuvieron que conformar con gol de campo a cargo de Robbie Gould.
De inmediato, los Jefes registraron su respuesta, gracias a que Travis Kelce y Damien Williams, se metieron a terreno rival, en 14 yardas, posteriormente, los dejaría a media yarda de la zona de anotación.
Sería el momento para que apareciera Patrick Mahomes, al aprovechar la apertura de la bolsa de la protección y llegar a la tierra prometida, en el final del primer cuarto. Damien Williams le dio un nuevo primero y 10, lo que más tarde, Harrison Butker consiguiera el gol de campo de 31 yardas, y Kansas ya lo ganaba 3-10. Llegaría el turno de mostrarse a Raheem Mostert, quien los puso en la 47 del rival con ataque terrestre, y los acercaría Garoppolo al encontrar libres las manos de Kyle Juszczyk, quien entró al evadir la línea defensiva y aterrizar en zona de anotación.
Gould, hace válido el punto extra y se empata 10-10. Tras el espectacular show de medio tiempo que ofrecieron las latinas, Shakira y Jennifer López, el ovoide volvió a la actividad sobre el emparrillado en Miami, Florida.
Los Niners volvían con todo en territorio enemigo. De nuevo, Juszczyk recibió un pase de 14 yardas de Garoppolo, enseguida, acabaron con su ataque en cuarta y dos para que Gould, desde las 42 yardas, decretara otro gol de campo. Jefes y Mahomes, se querían acercar, pero un error del mariscal ocasionó la intercepción y el ovoide pertenecía a los 49ers, quienes a través del acarreo de una yarda de Raheem Mostert, tomaron 10 distancia en el partido ante su touchdown y el punto extra de Gould. Mahomes no quería cruzar los brazos, en jugada de engaño, Patrick se encontró a Travis Kelce en la zona de anotación sin marca, y los Jefes, merodeaban el marcador, con el extra de Butjer, 20-17.
En una jugada polémica que se fue a revisión, Damien Williams consigue el touchdown con el que daban la vuelta y se aumentaba con el punto extra a 20-24; ¡se vendría un cierre de locura! Tras aguantar en cuarta oportunidad, Kansas recuperó el ovoide, lo que terminó rápidamente con el segundo touchdown a toda velocidad de parte de Damien. Los Jefes, se proclamarían campeones de la NFL, luego de no lograrlo desde 1970.
Con información de Quadratín.