El seleccionado nacional en lucha, Eduardo Maximiliano García Betanzos continúa con su preparación en su natal Chiapas con el objetivo de llegar en óptimas condiciones al Campeonato Mundial de la especialidad, evento que repartirá los últimos boletos a los Juegos Olímpicos de Tokio.
Tras permanecer en confinamiento debido a la pandemia por Covid-19, el especialista en los 125 kilogramos, estilo libre, mencionó que ha sido complicado llevar un entrenamiento adecuado, ya que permanecen cerrados los centros deportivos, sin embargo, su entrenador elaboró un plan de entrenamiento que le permite reforzar la parte física y el nivel de fuerza.
“Aquí en Chiapas con mi entrenador hemos estado haciendo todo lo posible para tener una buena base física, que es lo más importante para no perderla; estamos haciendo mucho trabajo de pista, corriendo en la calle, haciendo rutas donde esté completamente desolado para evitar contagios y manteniendo más que nada los niveles de fuerza.
“El plan ahorita es mantener el fondo físico, que es parte esencial del entrenamiento. Estamos enfocados en mantener los niveles de fuerza, lo físico y todo eso para que, cuando se reabran los centros estatales o el propio CNAR, se mantengan las capacidades y empezar con entrenamientos de alta exigencia para entrar de lleno a las competencias” señaló el deportista.
García Betanzos disfruta de su primer ciclo olímpico, experiencia que, dijo, lo motiva para conseguir la cuota a la justa veraniega y con esto convertirse en el primer gladiador mexicano en lograr el pase en la división de 125 kilogramos.
“Lo estoy asimilando de la mejor manera, porque al ser mi primer proceso olímpico pues me he dado cuenta de muchas cosas que a nivel internacional todo se puede lograr, que México es un país con grandes exponentes, ahorita tenemos a dos clasificados, que son: Jane Valencia y Andrés Vargas, entonces, uno como luchador va aprendiendo algo nuevo y el estar en un proceso olímpico, las competencias internacionales te dejan aprendizajes, tanto tácticos como personales, y más que nada tú vas entendiendo lo que es estar cerca de los olímpicos, porque no están tan lejos como muchos creen”, indicó el chiapaneco.
Gracias a su dedicación, esfuerzo y determinación, Max Betanzos se ha mantenido en la lucha por 10 años, lo que lo llevó a convertirse en multimedallista de Olimpiada Nacional, medallista panamericano y Premio Estatal del Deporte, pero su máximo logro, hasta el momento, es haber representado a México en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Nanjing 2014. En este proceso olímpico participó en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018.
“Yo empecé en el año 2010, a la edad de 12 casi 13 años, llevo 10 años practicando la lucha, empecé siendo categoría escolar 85 kilos, pero el esfuerzo y mi propia determinación hizo que yo fuera evolucionando, en comparación con los demás deportistas. A los dos años de empezar en la lucha fui campeón nacional de olimpiada en Puebla, y de ahí, empezaron a verme.
“Con esa misma determinación llegué a 2014, que fue mi primera competencia internacional en Brasil, era un Panamericano cadete, clasificatorio a los Juegos Olímpicos de la Juventud para Nanjing, China, gané esa competencia y fui de los únicos dos representantes de lucha que fue a competir”, recordó el luchador.
Con información de CONADE.