Facebook anunció que había alcanzado un acuerdo para adquirir la empresa emergente CTRL-labs, dedicada a la investigación de tecnología que permita controlar ordenadores directamente desde el cerebro mediante señales neuronales.
La compañía, que hizo pública la adquisición en la página en la red social de su vicepresidente para realidad virtual y aumentada, Andrew Bosworth, no detalló la cuantía de la operación, pero el medio económico especializado CNBC la cifró en entre 500 y mil millones de dólares.
La visión de este proyecto es una pulsera que permita a la gente controlar sus aparatos como una extensión natural del movimiento”, indicó Bosworth, quien apuntó que la CTRL-Labs, con sede en Nueva York, pasará a formar parte de la división Facebook Reality Labs, que desarrolla, entre otras, aplicaciones de realidad aumentada.
Según el vicepresidente de la red social, la pulsera decodificará las señales eléctricas emitidas por las neuronas dirigidas a los músculos con órdenes como “haz clic en el ratón” o “aprieta un botón” y las traducirá a señales digitales que puedan ser comprendidas por el ordenador.
Captura tu intención de manera que puedas compartir una fotografía con un amigo usando un movimiento imperceptible o simplemente teniendo la intención de hacerlo”, explicó Bosworth.
La empresa con sede en Menlo Park (California, EE.UU.) aseguró que espera desarrollar este tipo de tecnología “a escala” y llevarla “con mayor rapidez” a los productos de consumo.
En la actualidad, CTRL-labs ya está trabajando en una pulsera de estas características que pueda convertir señales neuronales en digitales y controlar así aparatos con la mente, aunque la tecnología todavía se encuentra en fase de desarrollo.
La firma emergente fue fundada en 2015 por dos doctores en neurociencia, Thomas Reardon y Patrick Kaifosh, y consiguió en febrero pasado 28 millones de dólares en financiación provenientes de fondos vinculados a Amazon y a Alphabet (matriz de Google).
Por su parte, la compañía que dirige Mark Zuckerberg se encuentra en un momento delicado, en el que pese a que su negocio sigue creciendo y obteniendo pingües beneficios, se ha visto salpicada por multitud de escándalos relativos a su gestión de la privacidad de los usuarios que han mermado considerablemente su imagen pública.
En paralelo, Facebook está siendo objeto de varias investigaciones antimonopolio en Estados Unidos por posibles prácticas contrarias a la libre competencia, que entre otras cosas están escrutando adquisiciones de empresas similares a la anunciada este lunes.
Con información de Noticieros Televisa.