Las autoridades de la norteña ciudad china de Shulan, que quedó de nuevo en confinamiento total tras el rebrote del nuevo coronavirus, advirtieron que quienes mientan sobre su estado de salud se harán acreedores a sanciones.
La policía de la urbe, ubicada en la provincia de Jilin y que se ubica en la frontera con Corea del Norte, indicó que incluso quienes violen la cuarentena serán procesados, de igual manera aquellos que intenten propagar rumores sobre la emergencia sanitaria en la región, informó el diario South China Morning Post (SCMP).
Autoridades de la Comisión Nacional de Salud (NHC, por sus siglas en inglés) han anunciado de manera oficial sus temores por una segunda ola de infecciones en el gigante asiático.
La provincia de Jilin recibe especial atención porque apunta a convertirse en un nuevo epicentro de la enfermedad, según la autoridad médica, si no se toman medidas preventivas.
Al momento, la ciudad de Jilin, capital de la provincia del mismo nombre, ha cerrado ya escuelas y prohibido cualquier tipo de reuniones para evitar nuevos contagios de coronavirus.
En tanto, la NHC ha mostrado preocupación por la extensión de los contagios en la metrópoli de Jilin que se han extendido a la vecina Shulan, con un total de 45 nuevas transmisiones.
No obstante, de acuerdo con el SCMP, la Comisión de Salud en la provincia de Jilin comunicó que la situación está bajo control, pese a decretar un mediano estado de riesgo de contagio en ciertos distritos.
Con información de Excélsior.