Moscú anunció este jueves (30.01.2020) el cierre de sus fronteras con el gigante asiático, cada vez más aislado por la expansión del coronavirus, que se detectó por primera vez en la ciudad china de Wuhan. El letal virus ya ha dejado unos 170 muertos.
“Una orden fue firmada hoy y entró en vigor. Informaremos hoy a todo el mundo de las medidas tomadas para cerrar la frontera en Extremo Oriente”, dijo el primer ministro Mijaíl Mishustin, citado por agencias rusas.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores de Rusia ha recomendado a los ciudadanos no viajar a China a menos que se trate de casos de extrema necesidad.
Rusia ha suspendido además temporalmente la entrega de visados electrónicos a ciudadanos chinos, que no podrán ingresar al país a través de los puestos de control ubicados en el Lejano Oriente, la región de Kaliningrado, San Petersburgo y la región de Leningrado.
De momento no se ha registrado ningún caso del virus 2019-nCoV en el país, de acuerdo con las autoridades. Sin embargo, el presidente Vladímir Putin pidió estar alerta ante imprevistos para minimizar las pérdidas humanas.
Los científicos rusos, asegura Moscú, están además “cerca” de crear una vacuna contra el coronavirus y ya han desarrollados dos pruebas para su detección.
Con información de DW.com