El coordinador corporativo de la Central Nucleoeléctrica de Laguna Verde (CNLV), Héctor López Villarreal, desmintió que la planta enfrente problemas técnicos, estructurales, de desempeño y fugas radioactivas por encima de la norma, como documentó el semanario Proceso en la edición que se encuentra en circulación (número 2249).
El coordinador corporativo de la Central Nucleoeléctrica de Laguna Verde (CNLV), Héctor López Villarreal, desmintió que la planta enfrente problemas técnicos, estructurales, de desempeño y fugas radioactivas por encima de la norma, como documentó el semanario Proceso en la edición que se encuentra en circulación (número 2249).
En conferencia de prensa, el experto aseguró que los principales objetivos de la Central Nucleoeléctrica son la seguridad del personal, garantizar la confiabilidad de la generación, así como la excelencia en los procesos y la operación con los más altos estándares de calidad y eficiencia.
Sin aludir a la revista Proceso, añadió que el personal que labora en la planta está altamente calificado y que la Nucleoeléctrica es un soporte importante en la operación confiable del sistema eléctrico nacional y es un logro del sistema de generación eléctrica, pues combina la tecnología de bajo costo variable de generación y la ausencia total de gases invernadero, es decir, aclaró, se evita enviar a la atmósfera cerca de 12.4 millones de toneladas de bióxido de carbono.
López Villareal, quien participó en el diseño, construcción e inicio de la puesta de servicio de Laguna Verde, presumió que en los 29 años de existencia de la planta ha tenido una operación confiable.
Todo en regla
La central, dijo, cuenta con todos los permisos y licencias para su operación.
“Nunca se han presentado incidentes graves, ya sea liberación de radiación a la atmósfera o dosis fuera de los estándares al personal. De haberse presentado un incidente grave, la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardias ya hubiera revocado la licencia”.
También comentó que hace un par de semanas se presentó el Programa de Excelencia para los próximos tres años, además que cada año se hacen los ajustes implementando nuevas tecnologías para que las unidades estén actualizadas y sin problemas de seguridad y generación.
En relación con la vida útil de la Central, el funcionario indicó que está en proceso la renovación de la licencia para la unidad uno y que pueda seguir operando por los siguientes 30 años, y que para la unidad dos se iniciará este proceso de renovación en el año 2025.
“Una vez que ambas unidades cumplan sus ciclos de vida útil se tomarán todas las medidas pertinentes y por ley en la remediación y limpia de radioactividad”, manifestó.
En cuanto al programa de mantenimiento, López Villarreal informó que para las centrales generadoras el presupuesto designado este año fue de 24 mil 900 millones pesos y que se programaron 596 mantenimientos y que a la fecha se han realizado 545.
El próximo año, prosiguió, se realizarán 640 programas de mantenimiento.
Con información de Proceso.